No voy a quejarme
Sólo diré que después de ti
perdí la calma
Me dejaste adentro
en un remolino
de ruido e imágenes
con mi carne cruda
No lo vi venir
No te sospeché violento
y ahora sólo busco
un espacio en blanco
lejos de tus dientes afilados
No puedo culparte
Sólo quisiera conmigo
un poco de mi silencio
aunque sé que tú
no estarás dispuesto a devolverme
absolutamente nada